Me cuesta mucho aceptar que siendo un tipo adulto como soy por mi mente estén ahora mismo pasando pensamientos propios de un adolescente, pero lo cierto es que, posiblemente guiado por algo irracional, ando enfrascado en idas de olla e ilusiones bastante poco propias de los 28 añazos que tengo, ando con la mente en otro lado, escuchando permanentemene dentro de mi la voz que quiero oír y viendo la cara que quiero ver.
Estoy en una situación muy curiosa en la que a la vez estoy ilusionado y totalmente aterrado por meter la pata, no quiero volver a pasar por la experiencia de que la única persona que ha sido capaz de hacerme perder la cabeza salga de mi vida sin más, es una de las cosas que más me ha dolido y posiblemente de las que recordaré como un momento muy bajo de mi vida. Sinceramente, no necesito más momentos de esos, me crispan los nervios, me hacen sentir mal conmigo mismo y me hacen ver todo absolutamente negro, ponen delante de mí una realidad que no me gusta, me hacen sentir completamente prescindible para el resto de la humanidad, profundamente desgraciado y mi vision de mi mismo se desploma de un plumazo, por eso es que tengo un miedo atroz a cagarla e intento medir cada cosa un millon d eveces, aunque sé que eso puede llevarme a ser o resultar frío y a no ser yo mismo.
Espero saber llevar la situación, y poder conseguir que no se escape el tren otra vez, sería una decepción grandísima, auqnue mentiría si dijese que no he previsto la posibilidad, y que no sé lo que es.
Puede ser que ella sea la causa de mi fortuna, como la Bendecida de Bunbury, o la causa de mi desgracia. La moneda está en el aire y sólo se juega una vez, espero que salga lo que yo elegí, porque si no todo mi crédito sentimental se irá al garete sin más.
Suspicious minds
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